De Esteparias..

Aún no había amanecido y aprovechando el frescor de la madrugada puse rumbo a Villafáfila, una vez más...
Como de costrumbre, en Villalpando sobre las 7.00 de la mañana las mujeres ya estaban de caminata por la carretera, ¡ ésto es amor al deporte ! y como la carretera que va de Villalpando a Villafáfila sigue cortada, es necesario acceder a la reserva por San Esteban del Molar y San Agustín del Pozo, una zona bastante interesante para observar grupos de avutardas y en invierno zoan querenciosa también para los Gansos.
Empiezo mi recorrido ,como siempre, por la laguna de Barillos, totálmente seca, este ño está siendo particularmente dificil para las zonas húmedas, apenas alguna charca puede observarse como testimonio de épocas mejores, y aquí pude observar a una pareja de Fumareles comunes con sus vuelos y "picados" acrobáticos, también algun juvenil de Fumarel que estaba menos por la labor de las acrobacias; algún ejemplar de Andarrios Grande y poco más.
Los gorriones alborotando la mañana, y el chillido de alarma del Milano Negro, como melodía para mi paseo matutino por uno de los caminos que siempre me ha deparado alegrías ornitológicas y como no podía ser menos, me esperaba apenas a unos 90 m un grupo de unas 10 Avutardas alimentándose me aproximo poco a poco y ellas deciden obsequiarme con el premio por haber madrugado de poder contemplarlas a placer mientras se alimentan y acicalan su plumaje, unas cigueñas que estaban con ellas deciden que no quieren compartir el momento y emprenden el vuelo.
La mañana es mágica, una luz increible, un frescor en el aire, y hasta los jovenes de collalba gris se suman al espectáculo con sus chillidos; estos son lo momentos que los amantes de las aves y de la naturaleza en general soñamos. Aprovecho para digiscopear un rato y las dejo que sigan plácidamente su jornada.
A lo largo de la mañana pude observar varios grupos de Avutardas, todo un placer. Continué por los caminos que llevan a la Laguna Grande, con varios jovenes de Alcaudon comun y grupos e Perdices con sus perdigones, por cierto uno de estos grupos familiares estaban en el tejado de un palomar, siitio raro donde los haya, compartiendo espacio con un Mochuelo.
La laguna grande seca también, y Otero con sus habitantes habituales, Primillas, Mocuelos, Palomas, Estorninos. Continuo adelante y me asombra el tamaño de una rapaza posada en un poste electrico: una Aguila Culebrera preciosa, supongo que será la "colega" de Alfonso Rodrigo.
Ya de vuelta por los caminos y tras disfrutar con el vuelo de algun cenizo, la segunda sorpresa del día: un grupo de 5 Ortegas posadas cerca de una charca a unos 15 m de mi coche, se me dispara el corazon y renuncio a fotografiarlas por temor a que empredan el vuelo, las disfruto un buen rato con su andanzas, ¡que belleza!, es mi ave favorita por muchas razones, sobre todo por la magia que emanan..
Son las 11 de la mañana y no es cosa de pasar más calor, a Pucela..
Ya veis, Villafáfila a mi nunca me defrauda en cualquier época del año.., tiene un "algo " que te atrae a volver desde la primera vez que la conoces, y ya estás enganchado de por vida.
Un placer, nos vemos..