Andanzas por el páramo

viernes, diciembre 08, 2017

Montes Torozos - La Nava

3 de Diciembre de 2017


Mañana muy fría la del pasado domingo, a las 8 de la mañana, cuando salí de casa, aún no había amanecido y el termómetro marcaba -3ªC.
Al subir al páramo cerca de  la localidad de La Mudarra , la temperatura bajó a -4ºC.
El sol tardó en salir, los campos lucían una capa blanca por la helada nocturna y algunos bancos de niebla me acompañaban por el camino.
Ausencia de aves en estos primeros momentos del día, el silencio lo dominaba todo. El cielo despejado, mostraba las estelas de los aviones, mientras que a ras de tierra la visión era complicada.
Entre Valdenebro y Montealegre por fin se hizo la luz.


Y el sol apareció entre unas encinas y los primeros rayos me dejaron observar a un grupo de 12 perdices rojas con la escarcha aún entre sus plumas.
El manto blanco se había generalizado, la temperatura había bajado ya a -6ªC.
Al llegar a Montealegre, un grupo de Milanos Reales descansaban todavía en su dormidero y comenzaban su actividad. Sus colas ahorquilladas se distinguían perfectamente entre las ramas de los árboles.


Seguimos avanzando y excepto algún Ratonero en sus posaderos habituales, las únicas aves visibles eran las Cornejas Negras.


Pasado Meneses de Campos, ya en la provincia de Palencia, la niebla adquiere más protagonismo, dejando a penas visible unos escasos metros de tierra helada. El sol pugna por hacerse fuerte y salir entre las nubes, pero esta mañana no lo conseguiría.


El silencio se agiganta aún más y donde otros años se escuchaba el inconfundible sonido de los gansos, hoy no se percibe nada.
En Castromocho, pequeños grupos de Estorninos Negros y un bonito ejemplar de Ratonero muy blanco, posado en la vieja harinera.


Llegamos a Fuentes de Nava, esperando la algarabía de los Gansos, el "jaleo" de las distintas especies de anátidas  o la elegancia de las Avutardas.
Pero ni el menor rastro de vida alar, las lagunas están secas a día de hoy..
Escucho a lo lejos el inconfundible sonido de un ganso que vuela solitario alejándose de las lagunas para incorporarse a un pequeño grupo de unos 100 individuos posados en un cerro próximo.
Eso y algún que otro Ratonero es lo único que observé por la zona.
El camino de vuelta lo hice por Abarca de Campos, donde parte del Canal de Castilla se había helado y pude observar un par de Lavanderas Blancas y un Cernícalo Vulgar.
Y acabé disfrutando de los Milano Reales cerca de Medina de Rioseco.




Mientras disfrutaba con los Milanos, se escuchaba cerca de allí el sonido de las escopetas de los cazadores que andaban por la zona y recordé al grupo de perdices con las que había compartido el amanecer, deseo que hayan tenido suerte.
Nos vemos..


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