Por el páramo helado..

27 de Diciembre de 2009

Acabé el día anterior viéndose poner el sol en Urueña en plenos Montes Torozos, y en la mañana de ayer observé su salida también en los Torozos, pero a la altura de Villanubla .
Helada importante la de esta mañana unos -3º C ,con bancos de niebla y una escarcha que como un manto blanco cubría todas las tierras.
No suelo salir mucho los domingos, además de porque suelo trabajar, no me gusta encontrarme con las cuadrillas de cazadores que deambulan por estas tierras y que " levantan" cualquier signo de vida que por aquí se mueve y que, con buen tino, buscan refugio donde pueden.
Pero es que al ver el cielo despejado , no pude contenerme y salí en busca de la sensación del frío en la cara.
Con las primeras luces, varias especies se calentaban tras una fría noche, de cara al sol, como este Ratonero de la foto de arriba, o los Cernícalos posados en las señales de tráfico de la carretera comarcal , las palomas sobre las tejas con escarcha, o un par de conejos agazapados cerca de una pared de adobe...

En las tierras que ya verdean , un grupo considerable de Gansos buscan ya alimento; éstos probablemente acostumbrados a otras latitudes más norteñas, no parecen notar mucho el frío.

Varios grupos se mueven de aquí para allá, y llenan la mañana de algarabía y vuelos..

Tras la correspondiente observación minuciosa, no veo ninguna especie distinta al ansar común, ni tampoco ningún ejemplar con " collar".

Me dedico a disfrutar de la estampa característica de estas tierras en invierno: helada mañanera, escarcha blanca en los campos, tímido sol, el frío que se te cuela por los huesos, el sónido inconfundible del vuelo de los gansos y el graznido de unas Cornejas..., de repente el silencio..., unos ladridos de perro se encargan de que el silencio desaparezca, el perro me mira y continua su camino junto al rebaño de ovejas tras la llamada del pastor...

Centenares de alas poderosas..se mueven al unísono y la tierra que está enfrente de mí se queda despoblada de Gansos..., vuelan en círculos y se posan unos metros más allá.

La calma regresa nuevamente, y el observador helado y contento reemprende la marcha.

Algunos bancos de niebla se dejan caer por la zona y el frío se hace más liviano para poder entrar en tu cuerpo de una forma más sutil..,pero que alcanza su objetivo..

Es interesante curiosear las distintas formas que adopta el hielo según donde se hospeda y como las incorpora la planta a su fisonomía..

Lugar interesante cualquier cuneta para observar.., mientras el sol trata de imponerse al manto gris...

Unas Lavanderas Blancas deslizan sus patas negras por las pequeñas charcas heladas y un pequeño grupo de Estorninos Negros me observan desde un cercado..

La mañana no está para bromas.., dos figuras difusas cruzan la carretera.., dos perros de caza seguidos por su dueño con la escopeta al hombro y la " percha" vacia...,se les traga enseguida la niebla...

Intento cambiar el gris por el azul, unos pocos kilómetros después lo acabo encontrando, me entretengo con el vuelo de un macho de Aguilucho Pálido, con un Alcaudón Real posado en un espino, con un grupo de Cigüeñas Blancas en un campanario y al final me encuentro a esta Chova Piquirroja solitaria en un medio que habitualmente no es el suyo.

Quizás la niebla la ha despistado un poco, o es que quiere ampliar sus horizontes..

Así que posó así de chula para mí.

La mañana avanza, pero mis pies siguen congelados y los Milanos Reales siguen empeñados en chulearme una vez más y no dejarse fotografiar.

Vuelvo sobre mis pasos y entro en el reino de la niebla una vez más para regresar a mi casa.,espero que el tiempo en los próximos días me dé una tregua y poder escaparme a Villafáfila que este año entre unas cosas y otras se me está resistiendo.

Nos vemos..